Abrazo mecánico

Descubrí a Temple Grandin hace unos años al caer en mis manos su libro Interpretar a los animales.
Esta señora es doctora en Zoología, profesora en la Colorado State University, tiene su propio negocio, escribe libros y además es autista.
Su Sistema Nervioso Central se sobreestimula con los sonidos y colores, no tolera el contacto físico y ha tenido que aprender habilidades sociales. Ella piensa en imágenes, es como si tuviera un Google en el cerebro.
Las relaciones humanas no le interesan en absoluto pero siente una gran empatía por los animales.

A los 16 años fue a trabajar en la granja de sus tíos y descubrió un artilugio formado por dos placas metálicas que tranquilizaba a las vacas antes de una exploración veterinaria. La presión en los costados hacía que el animal se relajase al instante.

Dos años después Temple se construyó una máquina similar, su propia máquina de abrazos. Uno mismo puede controlar la duración e intensidad del abrazo, la suave presión produce un efecto calmante. Es perfecta para la relajación de personas con autismo, está comprobado. Se utiliza en clínicas que tratan a niños autistas.
Fue a la universidad, se doctoró y se convirtió en diseñadora de mataderos.
Sí, mataderos. Reformó mataderos por todo EE.UU. Debido a su autismo sabe lo que siente una res antes de morir, si tiene miedo o no, y con sus proyectos intenta que el último momento de la vida de un animal sea lo más agradable posible. Sus diseños me parecen lo más humanitario y realista en años.

Os aconsejo sus libros y autobiografía así como el documental que hizo sobre ella el genial Errol Morris.
Lo de los mataderos no es agradable, lo sé.. pero Temple es un amor. Y lleva siempre camisas de cowboy molonas!!